miércoles, 4 de enero de 2012

Con amor

A menudo padecemos las consecuencias de los errores de interpretación. A menudo eso puede generar en nosotros un proceso de consecuencias imprevisibles: lo mal entendido hace que nazca el orgullo, el ego, el egoismo.... cualquiera de esas funciones opuestas al respeto, aceptación, generosidad, Amor..... A mi la vida me regaló, ya hace tiempo, la posibilidad de transmutar -o intentarlo- esos sentimientos que tienen vida propia en obra, y que solamente tiene una intención: construir armonia en el desorden, belleza en la fealdad, entrega en el egoismo, luminosidad en lo escondido.
Que bueno seria conseguir no tener ideas previas de como deberian ser las cosas o como queremos que sean
Gracias Vida





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